Lugar de oración y reflexión, está ubicado a un costado norte del río, es visitado por sus habitantes y afuerinos, es visita obligada por su atractivo.
La historia popular del Cristo indica que es milagroso, debido a que muchas personas dejan sus agradecimientos a través de placas en muestras de los favores concebidos, transformándolo en un lugar de verdadera devoción.
El Cristo data del año 1920 fue puesto en un lugar de la hacienda Picoltué, por un matrimonio de Mulchén que trajo esta imagen desde Francia a la comuna.
Ubicación
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